"Me arrepiento de todos mis tatuajes" ¿Y ahora qué hacemos?
ESPAÑA: Lidia Reyes tiene 32 años, es catalana y se está sometiendo a un doloroso tratamiento con láser para volver a su rostro original sin tatuajes. "Me cansé de verme tan llena", dijo. Primero soñó con ser la mujer más tatuada del mundo. Lo hizo realidad y luego se arrepintió. Ahora busca quitarse algunos de los dibujos de su rostro con láser.
"Extraño mi rostro de antes”, aseguró Lidia Reyes, que vive en España y se hizo conocida en toda Europa por su ambición de conseguir el récord Guinness. La mujer explicó que se está quitando los tatuajes de su cara porque se cansó, no porque no le gusten o se vea fea. "A mí me encantan los tatuaje de la cara, por eso me los hice”.
"Extraño mi rostro de antes”, aseguró Lidia Reyes, que vive en España y se hizo conocida en toda Europa por su ambición de conseguir el récord Guinness. La mujer explicó que se está quitando los tatuajes de su cara porque se cansó, no porque no le gusten o se vea fea. "A mí me encantan los tatuaje de la cara, por eso me los hice”.
Volver a lo que era antes, a su rostro, ese es el principal motivo según explicó."No me los voy a quitar todos, me voy a quitar el 95% de los tatuajes de la cara y luego me haré alguno nuevo incluso, pero me cansé de verme tan llena”, asegura en un video que subió a YouTube. La joven de 32 años, madre de dos hijas se tatuó gracias a colaboraciones con tatuadores que dibujaron sobre su piel a cambio de poder publicitar sus trabajos en redes sociales.
Ahora se somete un doloroso y largo tratamiento para eliminar los dibujos de su rostro que llevará un par de meses. Y para costearlo recurrió a la publicidad. "Los animo a que prueben el láser, yo estoy muy contenta. Si ven fotografías mías de antes verán que el láser va haciendo efecto, la calavera estaba más negra, la nariz la tenía completamente negra y ya está muy difuminada... Poquito a poco, paciencia. Es un proceso largo y lento, pero eficaz", sostuvo.
Ahora se somete un doloroso y largo tratamiento para eliminar los dibujos de su rostro que llevará un par de meses. Y para costearlo recurrió a la publicidad. "Los animo a que prueben el láser, yo estoy muy contenta. Si ven fotografías mías de antes verán que el láser va haciendo efecto, la calavera estaba más negra, la nariz la tenía completamente negra y ya está muy difuminada... Poquito a poco, paciencia. Es un proceso largo y lento, pero eficaz", sostuvo.
Lo único que no podrá borrar es el eyeball tatto (el color rosa de sus ojos) totalmente irreversible. "Duele, como si te estuvieran dando latigazos con una goma en la cara, así es el dolor que se siente. Pero soy la menos indicada para hablar porque tengo un nivel de aguante del dolor muy alto”, contó.
"En la cara pica, sobre todo cuando se acerca al contorno de los ojos, es una zona delicada. Pero yo lo aguanto bien. ¿Si duele más o menos que hacerse un tatuaje? Depende del tatuaje, hay zonas no dolorosas y otras, como la cabeza o la primera falange de los dedos, que sí lo son”, explicó en otro de sus videos.
"En la cara pica, sobre todo cuando se acerca al contorno de los ojos, es una zona delicada. Pero yo lo aguanto bien. ¿Si duele más o menos que hacerse un tatuaje? Depende del tatuaje, hay zonas no dolorosas y otras, como la cabeza o la primera falange de los dedos, que sí lo son”, explicó en otro de sus videos.
No hay comentarios: