10 Cosas que prueban que una mujer es malísima en la cama
Las mujeres por lo general se quejan del hombre, que el rendimiento, que la rapidez, que la falta de juegos previos… Todo bien, pero, ¿y las mujeres? ¿Acaso todas son excelentes amantes?
En ocasiones no prestamos suficiente atención a nuestra intimidad y damos por hecho que todo está bien. Si tu chico la goza entonces es señal de que eres buena..¿O no? Lamentablemente, pensar de esta forma es lo que provoca que tu vida íntima sea tan plana y simple muchas de las veces.
Primeramente debemos aclarar algo: ser buena en la cama no significa que tu obligación sea SERVIR a la otra persona; claro que quieres ayudar a tu pareja con su placer, pero el tuyo también es importante y al final cada quien se hace responsable de su cuerpo.
Por esto, traigo 10 errores comunes que las mujeres cometen en la cama y que las orillan a tener vidas íntimas insatisfactorias y monótonas, o sea, que son MALÍSIMAS en la cama.
1. Tu mente está en otro lado
Nada arruina tanto el momento como mezclar la situación laboral con las relaciones íntimas. Si eres de aquellas que comienza hablar sobre las cuentas, el jefe y los problemas de la oficina, déjame decirte que que ni tu, ni tu pareja vana disfrutar completamente en la cama si tu mente está en otro lado.
2. Todo te da vergüenza
¿Tienes miedo a mostrar tu cuerpo desnudo? En pleno acto, estás pensando en la celulitis, los rollitos, los kilos de más… Y siempre prefieres apagar la luz cuando empieza el acto. Si es así, tenemos una mala noticia: estas inhibiciones te convierten en una mujer mala en la cama. ¡Deja de taparte! Cuando pierdas la vergüenza, ambos disfrutarán más del momento.
3. Ser totalmente pasiva
Ya sabemos que los hombres suelen ser más activos, pero no por eso debes actuar todo el tiempo como una roca. Si no inicias la interacción, si no sugieres posiciones, si no dices por donde sí y por donde no, entonces estás dejando todo el trabajo a la otra persona.
A los hombres les gustan las mujeres que toman el control. Si quieres disfrutar del momento, no le dejes todo el trabajo a él y, de vez en cuando, agarra las riendas de la situación: bésalo cuando menos lo espera, sácale la ropa, y toma las riendas”.
4. Sentirte obligada
A veces, cuando tenemos una relación formal sentimos que tenemos la obligación de tener relaciones íntimas con nuestra pareja cada cierto tiempo sólo por cumplir. ¡Error! Para disfrutar de tus encuentros debes estar 100% motivada y con muchas ganas. Si sientes ‘obligación’ ¡estás perdida!, lo único que lograrás es que se vuelva monótono y una actividad más que debes cumplir de tu lista de pendientes.
5. Hablar demasiado
Es verdad que algunas palabras atrevidas son necesarias para elevar la temperatura, pero cuando se está en la cama se tienen que dejar que todos los sentidos despierten. Si eres de esas chicas que elige decir algo muy importante o platicar algo específico en plena acción, déjame decirte que te estás distrayendo (y a tu pareja también) del objetivo principal: SENTIR Y GOZAR, no reflexionar.
Esta bien preguntarle cosas como si le gustaría experimentar algo nuevo, pero existen otras preguntas que delatan tu inseguridad; olvídate de llenar de preguntas y sólo déjense llevar y comiencen a experimentar.
6. Dices que sí a todo
Lo repito: ser buena en la cama no quiere decir que hagas TODO lo que pidan. Tus gustos y deseos pueden ser diferentes a los de tu pareja y si de plano hay algunas cosas que no van contigo, no tienes obligación alguna de acceder a hacerlas. Aunque sea tu novio, aunque sea tu esposo o quien sea, si tu NO quieres porque te sientes incómoda o agredida, simplemente NO SE HACE.
7. Reprimes tus fantasías
¡Ya basta de penas! Las mujeres también tienen fantasías y tienen derecho a cumplirlas sin miedo a ser juzgadas. Creo que esa es la causa principal de que muchas mujeres sean muy reservadas con sus deseos, pues temen que su pareja piense mal de ellas. Si no eres totalmente sincera con tus fantasías y gustos , nunca podrás sentirte plenamente satisfecha.
8. Te quedas callada
No hace falta despertar a los vecinos ni parecer una actriz de películas para adultos, pero un par de gemidos y alguna palabra subida de tono nunca están de más. Deja que tu placer se exprese.
9. Hablar de tus experiencias pasadas
Uno de los errores que cometen las mujeres es hablar de sus experiencias pasadas y en ocasiones hacer comparaciones que matan el momento de pasión.
10. Falta de movimiento
Así de sencillo, si una mujer no se mueve, no es buena en la cama. No se trata de que te aprendas el kamasutra al derecho y al revés, pero sí de que te involucres, te dejen llevar y, de vez en cuando, tomes la iniciativa.
Mujeres, lo más importante es sentirse cómodas con su sexualidad, sin presiones ni vergüenzas ni obligaciones.
Las mujeres por lo general se quejan del hombre, que el rendimiento, que la rapidez, que la falta de juegos previos… Todo bien, pero, ¿y las mujeres? ¿Acaso todas son excelentes amantes?
En ocasiones no prestamos suficiente atención a nuestra intimidad y damos por hecho que todo está bien. Si tu chico la goza entonces es señal de que eres buena..¿O no? Lamentablemente, pensar de esta forma es lo que provoca que tu vida íntima sea tan plana y simple muchas de las veces.
Primeramente debemos aclarar algo: ser buena en la cama no significa que tu obligación sea SERVIR a la otra persona; claro que quieres ayudar a tu pareja con su placer, pero el tuyo también es importante y al final cada quien se hace responsable de su cuerpo.
Por esto, traigo 10 errores comunes que las mujeres cometen en la cama y que las orillan a tener vidas íntimas insatisfactorias y monótonas, o sea, que son MALÍSIMAS en la cama.
1. Tu mente está en otro lado
Nada arruina tanto el momento como mezclar la situación laboral con las relaciones íntimas. Si eres de aquellas que comienza hablar sobre las cuentas, el jefe y los problemas de la oficina, déjame decirte que que ni tu, ni tu pareja vana disfrutar completamente en la cama si tu mente está en otro lado.
2. Todo te da vergüenza
¿Tienes miedo a mostrar tu cuerpo desnudo? En pleno acto, estás pensando en la celulitis, los rollitos, los kilos de más… Y siempre prefieres apagar la luz cuando empieza el acto. Si es así, tenemos una mala noticia: estas inhibiciones te convierten en una mujer mala en la cama. ¡Deja de taparte! Cuando pierdas la vergüenza, ambos disfrutarán más del momento.
3. Ser totalmente pasiva
Ya sabemos que los hombres suelen ser más activos, pero no por eso debes actuar todo el tiempo como una roca. Si no inicias la interacción, si no sugieres posiciones, si no dices por donde sí y por donde no, entonces estás dejando todo el trabajo a la otra persona.
A los hombres les gustan las mujeres que toman el control. Si quieres disfrutar del momento, no le dejes todo el trabajo a él y, de vez en cuando, agarra las riendas de la situación: bésalo cuando menos lo espera, sácale la ropa, y toma las riendas”.
4. Sentirte obligada
A veces, cuando tenemos una relación formal sentimos que tenemos la obligación de tener relaciones íntimas con nuestra pareja cada cierto tiempo sólo por cumplir. ¡Error! Para disfrutar de tus encuentros debes estar 100% motivada y con muchas ganas. Si sientes ‘obligación’ ¡estás perdida!, lo único que lograrás es que se vuelva monótono y una actividad más que debes cumplir de tu lista de pendientes.
5. Hablar demasiado
Es verdad que algunas palabras atrevidas son necesarias para elevar la temperatura, pero cuando se está en la cama se tienen que dejar que todos los sentidos despierten. Si eres de esas chicas que elige decir algo muy importante o platicar algo específico en plena acción, déjame decirte que te estás distrayendo (y a tu pareja también) del objetivo principal: SENTIR Y GOZAR, no reflexionar.
Esta bien preguntarle cosas como si le gustaría experimentar algo nuevo, pero existen otras preguntas que delatan tu inseguridad; olvídate de llenar de preguntas y sólo déjense llevar y comiencen a experimentar.
6. Dices que sí a todo
Lo repito: ser buena en la cama no quiere decir que hagas TODO lo que pidan. Tus gustos y deseos pueden ser diferentes a los de tu pareja y si de plano hay algunas cosas que no van contigo, no tienes obligación alguna de acceder a hacerlas. Aunque sea tu novio, aunque sea tu esposo o quien sea, si tu NO quieres porque te sientes incómoda o agredida, simplemente NO SE HACE.
7. Reprimes tus fantasías
¡Ya basta de penas! Las mujeres también tienen fantasías y tienen derecho a cumplirlas sin miedo a ser juzgadas. Creo que esa es la causa principal de que muchas mujeres sean muy reservadas con sus deseos, pues temen que su pareja piense mal de ellas. Si no eres totalmente sincera con tus fantasías y gustos , nunca podrás sentirte plenamente satisfecha.
8. Te quedas callada
No hace falta despertar a los vecinos ni parecer una actriz de películas para adultos, pero un par de gemidos y alguna palabra subida de tono nunca están de más. Deja que tu placer se exprese.
9. Hablar de tus experiencias pasadas
Uno de los errores que cometen las mujeres es hablar de sus experiencias pasadas y en ocasiones hacer comparaciones que matan el momento de pasión.
10. Falta de movimiento
Así de sencillo, si una mujer no se mueve, no es buena en la cama. No se trata de que te aprendas el kamasutra al derecho y al revés, pero sí de que te involucres, te dejen llevar y, de vez en cuando, tomes la iniciativa.
Mujeres, lo más importante es sentirse cómodas con su sexualidad, sin presiones ni vergüenzas ni obligaciones.
En ocasiones no prestamos suficiente atención a nuestra intimidad y damos por hecho que todo está bien. Si tu chico la goza entonces es señal de que eres buena..¿O no? Lamentablemente, pensar de esta forma es lo que provoca que tu vida íntima sea tan plana y simple muchas de las veces.
Primeramente debemos aclarar algo: ser buena en la cama no significa que tu obligación sea SERVIR a la otra persona; claro que quieres ayudar a tu pareja con su placer, pero el tuyo también es importante y al final cada quien se hace responsable de su cuerpo.
Por esto, traigo 10 errores comunes que las mujeres cometen en la cama y que las orillan a tener vidas íntimas insatisfactorias y monótonas, o sea, que son MALÍSIMAS en la cama.
1. Tu mente está en otro lado
Nada arruina tanto el momento como mezclar la situación laboral con las relaciones íntimas. Si eres de aquellas que comienza hablar sobre las cuentas, el jefe y los problemas de la oficina, déjame decirte que que ni tu, ni tu pareja vana disfrutar completamente en la cama si tu mente está en otro lado.
2. Todo te da vergüenza
¿Tienes miedo a mostrar tu cuerpo desnudo? En pleno acto, estás pensando en la celulitis, los rollitos, los kilos de más… Y siempre prefieres apagar la luz cuando empieza el acto. Si es así, tenemos una mala noticia: estas inhibiciones te convierten en una mujer mala en la cama. ¡Deja de taparte! Cuando pierdas la vergüenza, ambos disfrutarán más del momento.
3. Ser totalmente pasiva
Ya sabemos que los hombres suelen ser más activos, pero no por eso debes actuar todo el tiempo como una roca. Si no inicias la interacción, si no sugieres posiciones, si no dices por donde sí y por donde no, entonces estás dejando todo el trabajo a la otra persona.
A los hombres les gustan las mujeres que toman el control. Si quieres disfrutar del momento, no le dejes todo el trabajo a él y, de vez en cuando, agarra las riendas de la situación: bésalo cuando menos lo espera, sácale la ropa, y toma las riendas”.
4. Sentirte obligada
A veces, cuando tenemos una relación formal sentimos que tenemos la obligación de tener relaciones íntimas con nuestra pareja cada cierto tiempo sólo por cumplir. ¡Error! Para disfrutar de tus encuentros debes estar 100% motivada y con muchas ganas. Si sientes ‘obligación’ ¡estás perdida!, lo único que lograrás es que se vuelva monótono y una actividad más que debes cumplir de tu lista de pendientes.
5. Hablar demasiado
Es verdad que algunas palabras atrevidas son necesarias para elevar la temperatura, pero cuando se está en la cama se tienen que dejar que todos los sentidos despierten. Si eres de esas chicas que elige decir algo muy importante o platicar algo específico en plena acción, déjame decirte que te estás distrayendo (y a tu pareja también) del objetivo principal: SENTIR Y GOZAR, no reflexionar.
Esta bien preguntarle cosas como si le gustaría experimentar algo nuevo, pero existen otras preguntas que delatan tu inseguridad; olvídate de llenar de preguntas y sólo déjense llevar y comiencen a experimentar.
6. Dices que sí a todo
Lo repito: ser buena en la cama no quiere decir que hagas TODO lo que pidan. Tus gustos y deseos pueden ser diferentes a los de tu pareja y si de plano hay algunas cosas que no van contigo, no tienes obligación alguna de acceder a hacerlas. Aunque sea tu novio, aunque sea tu esposo o quien sea, si tu NO quieres porque te sientes incómoda o agredida, simplemente NO SE HACE.
7. Reprimes tus fantasías
¡Ya basta de penas! Las mujeres también tienen fantasías y tienen derecho a cumplirlas sin miedo a ser juzgadas. Creo que esa es la causa principal de que muchas mujeres sean muy reservadas con sus deseos, pues temen que su pareja piense mal de ellas. Si no eres totalmente sincera con tus fantasías y gustos , nunca podrás sentirte plenamente satisfecha.
8. Te quedas callada
No hace falta despertar a los vecinos ni parecer una actriz de películas para adultos, pero un par de gemidos y alguna palabra subida de tono nunca están de más. Deja que tu placer se exprese.
9. Hablar de tus experiencias pasadas
Uno de los errores que cometen las mujeres es hablar de sus experiencias pasadas y en ocasiones hacer comparaciones que matan el momento de pasión.
10. Falta de movimiento
Así de sencillo, si una mujer no se mueve, no es buena en la cama. No se trata de que te aprendas el kamasutra al derecho y al revés, pero sí de que te involucres, te dejen llevar y, de vez en cuando, tomes la iniciativa.
Mujeres, lo más importante es sentirse cómodas con su sexualidad, sin presiones ni vergüenzas ni obligaciones.
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